La última película del finlandés Aki Kaurismäki, se estrenó en la más reciente edición del Festival de Cannes, donde obtuvo el premio del jurado. Desde entonces ha seguido sumando nominaciones y premios en diversos eventos y festivales internacionales, además de reseñas llenas de elogios.
El cineasta finlandés de 66 años, se ocupó de la producción, guion y dirección de su vigésimo largometraje, que toma lugar en Helsinki, locación recurrente en su filmografía en donde se desarrolla un romance proletario, mientras que en el ambiente se siente la tensión de la guerra ruso-ucraniana y el descontento habitual del día a día.
Quizás el único indicio de que esta película toma en la actualidad son los informativos y noticias del conflicto, ya que el cotidiano particular de Kaurismaki carece de tecnología, publicidad, la última moda o arquitectura moderna. Al igual que sus otras películas, el universo atemporal que crea obedece a la lógica interna de sus personajes, que pertenecen a la clase obrera, quienes buscan subsistir mes a mes y alguna distracción de la miseria diaria.
«Hojas de Otoño», una historia de amor adaptada al tiempo
El escenario es común y corriente, compuesto por largos viajes en autobús, trabajos mal pagados y la ocasional salida social. La paleta de colores se compone de colores llamativos, rojos, celestes, ocres y cafés que evocan el otoño, deslavados por el gélido clima, aunque sin destriparlos por completo de su brillo.
Como lo indica el nombre, «Hojas de Otoño», la estación en que sucede la historia es clara, la metáfora de transición entre dos estados, donde los colores cálidos se topen con tonalidades frías que acaban por entremezclar dos opuestos en un punto medio.
La pieza final de este universo son sus personajes, a través de los cuales se completa una imagen fascinante. Alma Pöysti y Jussi Vatanen son unos amantes condenados por sus circunstancias, las cuales van desde malentendidos hasta situaciones que se escapan de sus manos. Personajes con carácter, faltas y aspiraciones sencillas que se comportan de una manera seca que contrasta con sus deseos. Sus actuaciones están cargadas de sutilezas y un humor que podría pasar desapercibido para algunos, ya que sus palabras funcionan dentro de un contexto específico del mundo en el que viven.
Kaurismäki logra capturar de manera poética una historia sencilla
Por otra parte, la incidencia de la guerra, a pesar de estar en un plano secundario, permea la trama. Entran en juego las consecuencias de tener conciencia de un conflicto bélico y continuar con el día a día. El efecto es mucho más profundo de lo que aparenta, hay un sentimiento de miseria y desesperanza latente, la normalidad preestablecida, que se ve interrumpida por un posible romance capaz de acabar con la rutina y soledad.
No hay un interés en hacer una crítica social, ni tomar bandos, más bien, busca generar empatía sobre una realidad agridulce sin ser condescendiente. Este retrato de la clase trabajadora es consciente de sí mismo a pesar de que a veces coquetea con los límites surrealistas. Con un ritmo lento y cuidado y unas actuaciones cargadas de carisma y sarcasmo, esta destaca como una obra única de la actualidad, al mismo tiempo que mantiene el sello característico de su director.
La normalidad es la protagonista absoluta
La gran proeza es la manera en que se crea una atmósfera interesante, cercana y sardónica de un espacio completamente ordinario. La película irradia carisma y autenticidad gracias a un manejo experto de cada momento. A pesar de la sencillez que transmite, hay un trabajo meticuloso en cada aspecto, desde diálogos precisos hasta referencias cinéfilas que logran transformar la capital holandesa en un mundo fantásticamente ordinario y único.
Sin duda una joya que te envuelve en su universo y que fácilmente puede hacer al espectador sentirse parte del rico mundo que habitan los protagonistas. «Hojas de Otoño» es una película para deleitar con una cinematografía que vuelve fascinante lo común y que entra en la intimidad de sus personajes, que a ratos puede ser incómoda y otras veces compasiva, aunque por sobre todo, humana.
Dónde ver «Hojas de Otoño»
La película de Aki Kaurismäki ya se encuentra disponible en la plataforma de streaming MUBI. Además, sigue en exhibición en algunas salas de cine independientes, como El Biógrafo.
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