En 2015, el director griego Yorgos Lanthimos estrenaba «La Langosta» en todo el mundo. Con un estilo poco convencional, incluso desconcertante, patente en su narrativa y estética, esta cinta se convirtió en un importante acercamiento a quienes desconocían los primeros pasos de su filmografía.
Con el tiempo, sumando dos largometrajes —«El Sacrificio del Ciervo Sagrado» y «La Favorita»— y varios reconocimientos de diferentes certámenes, Lanthimos se consolidó entre los grandes nombres del cine moderno, con una obra que, de cierta forma, acerca la perspectiva ‘autoral’ a la audiencia común.
Narrativas poco convencionales, lentes ‘ojos de pez’ desde las esquinas y una gran influencia del surrealismo han sido algunas de las muchas claves para entender a este cineasta, que además ha planteado un discurso bastante certero con respecto al ser humano y su psiquis, abordado casi siempre con una mirada negativa.
La tercera colaboración de Lanthimos con Emma Stone
Cuando Lanthimos eligió a Emma Stone para co-protagonizar «La Favorita», pocos se esperaban lo que resultaría ser una colaboración tan fructífera y prolongada. Este 25 de enero, con 11 nominaciones a los premios Óscar bajo el brazo y como parte de su tercer trabajo en conjunto, luego de realizar el cortometraje «Bleat», Lanthimos y Stone estrenan «Pobres Criaturas», mientras ya se edita «Kinds of Kindness», su próximo proyecto.
Basada en la novela homónima de Alasdair Gray y en un giro muy peculiar que rememora a «Frankenstein» de Mary Shelley, «Pobres Criaturas» es la historia de Bella Baxter (Emma Stone), una mujer traída de regreso a la vida por el doctor Godwin Baxter (Willem Dafoe) como un experimento.
Por supuesto, desde la curiosidad permanente del ser humano, Bella quiere descubrir el mundo y se embarca en una aventura intercontinental junto al abogado charlatán Duncan Wedderburn (Mark Ruffalo), travesía que la enfrentará a facetas desconocidas de la humanidad.
Un recorrido por el yo-interno y la vida misma
Como resultado del experimento de Godwin Baxter, Bella debe aprender todo desde el principio, como si volviese a nacer. Esta situación la lleva a una dinámica de ‘pez fuera del agua’ con todo lo que encuentra en su entorno, y con todo lo que desea para sí misma.
La realidad es que la protagonista es liberada a un mundo cruel y egoísta —como el mundo real—, un lugar desde el que Lanthimos cimenta gran parte de sus historias. Sin embargo, el giro inesperado se da gracias al positivismo y la bondad innata de Bella, quien como una niña pequeña, vive desde la inocencia, mientras alcanza un grado de conciencia que crece con la historia.
Mientras se descubre a sí misma, Bella entiende los mecanismos de un mundo que además de ser oscuro, se rige bajo un modelo patriarcal y punitivo, donde el control sobre la mujer es central para enaltecer la figura del hombre. A partir de aquí, la protagonista también persigue una liberación que se representa en lo intelectual, físico y sexual.
Estableciendo diálogos del presente
El personaje de Emma Stone se enfrenta a este mundo que constantemente ejerce diversas formas de violencia contra la mujer, específicamente desde el control de sus decisiones y libertades, aunque su desarrollo se da desde la propia conciencia: Bella es libre de los prejuicios e ideales que contaminan a la sociedad y entiende las relaciones humanas de una forma que incluso en el presente es ‘avanzada’.
Incluso el personaje más ‘liberal’ comete el error de intentar limitar a Bella, que construye su travesía desde lo que quiere para sí misma. Lo que podría llamarse una ‘desventura’ por el mundo, la lleva al concepto del libertinaje —en aristas como lo sexual, lo político y hasta lo emocional— desde el respeto y la aceptación de quién es, además de la comprensión profunda de esa pureza tan oculta de las personas.
Al final de su viaje, vemos a una protagonista completamente realizada, libre y dueña de su propia vida, manteniendo en armonía una forma de ver el mundo necesaria para el presente. En ese sentido, «Pobres Criaturas» es una historia ‘circular’ que avanza constantemente hacia un destino perfecto y lleno de sentido.
Un reparto sin puntos débiles y con gran potencial de premios
La ganadora del Globo de Oro a Mejor Actriz, Emma Stone, brinda su actuación más extravagante a la fecha. Su interpretación de Bella Baxter cautiva, intriga y simpatiza con la audiencia de una forma realmente genuina, estableciendo al personaje como el gran corazón de la historia y un motor para que el mensaje resuene con mucha fuerza.
A Stone la acompaña Willem Dafoe, quien debajo de un gran trabajo de maquillaje, entrega una actuación en una nota similar a sus trabajos previos, fuertemente inspirada en el arquetipo del ‘científico incomprendido’. El actor nos tiene acostumbrados a un estándar alto con sus trabajos, y aquí vuelve a cumplir con un rol excéntrico y una presencia muy intensa en pantalla.
Por su parte, Mark Ruffalo mantiene un papel de ‘alivio cómico’ durante toda la cinta, entregando una personificación graciosa, con tintes satíricos, pero que resuena demasiado a otros personajes que viven en un tono similar, volviéndose con el paso de los minutos, la personalidad menos interesante de la historia; un asunto del guion que aun así, el actor saca adelante por su compromiso de convertirse completamente en el abogado Duncan Wedderburn.
A la larga, «Pobres Criaturas» tiene un reparto lleno de talentos, y afortunadamente, todos brindan un trabajo de alto nivel, sin dejarse opacar por las actuaciones del resto y convirtiéndose en rarezas dentro de una película que de por sí es peculiar.
Look artesanal y una puesta en escena atemporal
La construcción del universo donde ocurre el filme es uno de sus aspectos más deslumbrantes y curiosos. Gracias al diseño de producción, todo el mundo que Lanthimos imaginó cobra vida con colores vibrantes y escenarios dignos de una pintura clásica, realizado además con paneles led, escenarios realistas y —como pocos lo hacen en el presente— con la menor cantidad de ‘pantalla verde’ posible.
Colocar a Bella en un momento que fusiona pasado y presente en su propuesta, logrando que la puesta en escena sea lo más coherente posible en relación al relato, significa todo un desafío, pero el resultado es atrapante, similar a un sueño constante e intenso, y la visualidad de «Pobres Criaturas» se convierte en otro aspecto que enamora desde el principio, complementando una obra que constantemente bordea la perfección en todas sus aristas.
«Pobres Criaturas»: La mejor película de Yorgos Lanthimos
El imaginario de Yorgos Lanthimos y su forma de ver el mundo y a la humanidad, componen una mente caótica y a la vez, fascinante. En «Pobres Criaturas», la voz del cineasta consigue expresarse a través de varios lenguajes, mientras alcanza una libertad total para contar una historia que nunca deja de ser humana y necesaria, acompañada de una actuación inolvidable y encantadora de Emma Stone. Una película que merece todos los premios a los que se encuentra nominada.
Dónde ver «Pobres Criaturas»
La película de Yorgos Lanthimos nominada a 11 premios Óscar ya se encuentra disponible en cines de todo el país.